Este jueves: HISTORIAS SECUNDARIAS



Bueno, como anfitrión no iba a falta a mi propia convocatoria. Ya es una costumbre publicar mi relato uno de los últimos (si no el último).

Espero que os guste.



PD: para leer los relatos de los compañeros pincha aquí.


—Aquella noche salí a emborracharme. No podía permitir que mi conciencia me hiciera cometer un suicidio. Suicidio si, eso es lo que hubiera pasado de haber hablado, de haber denunciado aquel atroz incidente. Me hubieran echado a la calle o, incluso peor, me hubieran metido en prisión, deportado o que se yo. Desde un principio La Junta de Energía Nuclear quiso taparlo, que nada de aquello trascendiera. Incluso hoy en día, la mayoría de los habitantes no saben lo que paso en pleno centro de Madrid.



—Usted estuvo allí, era su turno. Cuénteme que pasó aquel 7 de noviembre de 1970.



—Fui un cobarde, lo sé, pero nos entró el pánico. No sabíamos que hacer con aquella mierda que se había desparramado por el suelo. Hasta que alguien, no recuerdo exactamente quien, se le ocurrió que podíamos echarle agua y tirarlo todo a la alcantarilla.



—¿Sabe que eso fue lo peor que podrían haber hecho?



—Sí, lo sé. Cuando empezaron a llegar los camiones cargados de hortalizas y verduras podridas con aquel olor nauseabundo, cuando empezamos a detectar isótopos radiactivos procedentes del vertido…, entonces lo supe. Se compraron ingentes cantidades de productos de las huertas del Manzanares, del Jarama e, incluso, del Tajo. A los agricultores se les contó una milonga para que no sospecharan. Y a la ciudadanía, cuando los rumores no pudieron ser acallados, se les dijo que había sido un vertido sin importancia. ¡Que gran mentira! Los niveles de radiación fueron nueve millones de veces superiores al valor máximo permitido. ¡Nueve millones! ¿Se puede hacer usted una idea de la magnitud del vertido radiactivo?


—La verdad es que me cuesta.



—Estamos hablando que vertimos a los ríos de la comunidad residuos del reactor con una actividad brutal. Isótopos radiactivos como el Cesio 137, Estroncio 90, Plutonio, Americio, Rutenio, etc.



—Y luego, ¿qué pasó?



—Lo que pasó es que se montó una carajina monumental con los americanos. Cuando el vertido llegó a Lisboa y los portugueses se encontraron con toda la fauna de peces muerta, se mosquearon. Los americanos, que no son tontos, dijeron: “¡Ah! Con que el caudillo quiere tener armamento nuclear propio. Espérate que este se va ha enterar de quien corta el bacalao”. Y mandaron Henry Kissinge a apretarle los huevos a Franco. Ni decir tiene que lo de la bomba atómica española murió en aquel instante.



—¡Perdone! Hay algo que no entiendo. Han pasado 45 años de aquello, ¿cómo es que no se ha divulgado este terrible suceso y no se han puesto medios para paliar los efectos que aún tiene?



—Es usted demasiado joven. Permítame decirle una cosa que quizás le ayude en su profesión de periodista: el poder siempre intenta tapar sus mierdas y en España, aunque tenemos una pretendida democracia, el poder sigue en las mismas manos que en otros tiempos.



 ibso


Algunos enlaces por si quieres saber más: 


Comentarios

  1. Muy buen relato y con un final muy cierto.
    Un saludo.

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  2. Ufff, Ibso, sin duda alguna el final es la leche... una verdad como un templo de grande, se les hace grande la boca al decir democracia pero la verdad es que manejan las cosas a su antojo como quieren los grandes que mandan... Muy bueno tu relato, me ha gustado mucho...
    Muchos besines...

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  3. De esto no me acuerdo; aunque yo era una niña. En esa época todo se callaba y ahora tampoco se dice toda la verdad. Desde luego, una pasada.
    Un abrazo

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  4. El poder tiene sus metodos para que se oculten las verdades incomodas.
    Bien escrito tu relato. No te olvidés de incluirlo entre relatos jueveros, con su enlace.
    Saludos.

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  5. Muy buen relato que corrobora lo que siempre he pensado, una semi democracia que se encarga de tapar las M y un poder que no cambia de manos, sera verdad eso de que "lo dejo todo atado y bien atado...." besos.

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  6. Un desastre maquillado por el poder, otra medallita para Franco, ese....(no lo digo) ¡Que pánico!
    Un besazo

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  7. Hola Ibso. Tu siempre atento,a todos los chanchullos de los poderosos. Sobre todo los que atentan contra el medio ambiente, que son naturalmente los más graves.. Hasta ahora no te habia visto. Diculpa la tardanza en comentarte.
    Otra cosa: tu conducción ha sido impeccable, puedes repeptir cuando te plazca. Te dejo un fuerte abrazo.

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  8. Muy buena historia y me la creo ¿ocurrió algo así? Si no fue en el Tajo, probablemente en el Ebro, que además como no va a Portugal nadie se habría enterado... Tremendo el cinismo del entrevistado.
    Abrazos, Sr. director.

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  9. Sabes lo bueno que ha resultado este tema para mi? Muchos de los temas que aqui se tocaron no los conocía por no ser de españa..como el tuyo, que me ha hecho buscar si fue algo real o hasta que punto fue real...o el de Himilce...la verdad me gustó aprender un poco mas...besoss y gracias por el tema que colocaste

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  10. Y los tiempos no cambian, siguen con la misma táctica. El poder de la burocracia miente cuando dice que respeta los derechos humanos. Me gusto tu relato, lleno de la cruda realidad.

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  11. Está en las mismas manos, incluso ha pasado por otras; pero siempre es lo mismo, porque el poder... corrompe. Y pasan cosas tan tristes como las que relatas...

    Muy bueno.

    Muchos besos.

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